By Joseph Vargas.
Conexion San Angelo/Newsroom
San Angelo, Texas – Amid the current chaotic environment of having to wait in line to buy groceries, having limits on quantities of items that can be purchased, being forced to wear a mask, and even being arrested for playing at the park…one has to ask, what is really going on?
From the beginning, the Coronavirus models presented by so called ‘experts’ have been wrong. Initially, the public was told 2 million people would die. Later, the number went down to 100 thousand, and even later to 60 thousand. While the models were wrong, the government overreach was fast. Mayors and Counties Judges across the state were quick to force businesses, especially local small businesses to shut down. Citizens were told to stay home. In some cities, citizens were fined and arrested for playing in the park and even going to church.
The presence of Coronavirus does not suspend any part of the Bill of Rights. This government pandemic reminds me of the words of leftist Saul Alinsky, a liberal revolutionary, who in regards to controlling citizens, said, “[you]must shake up the prevailing patterns of their lives – agitate, create disenchantment and discontent with the current values, to produce, if not a passion for change, at least a passive, affirmative, non-challenging climate.”
La pandemia de coronavirus: ¿se trata de salud o control gubernamental?
Por Joseph Vargas.
Sala de prensa / Conexion San Ángelo
San Ángelo, Texas – En medio del entorno caótico actual de tener que esperar en la fila para comprar comestibles, ¿tener límites en la cantidad de artículos que se pueden comprar, verse obligados a usar una máscara e incluso ser arrestados por jugar en el parque ... uno tiene que preguntarse, ¿qué está pasando realmente?
Desde el principio, los modelos de Coronavirus presentados por los llamados "expertos" se han equivocado. Inicialmente, se le dijo al público que morirían 2 millones de personas. Más tarde, el número bajó a 100 mil, e incluso a 60 mil más tarde.
Si bien los modelos estaban equivocados, la extralimitación del gobierno fue rápida. Los alcaldes y los jueces de los condados de todo el estado se apresuraron a obligar a las empresas, especialmente a las pequeñas empresas locales a cerrar. A los ciudadanos se les dijo que se quedaran en casa. En algunas ciudades, los ciudadanos fueron multados y arrestados por jugar en el parque e incluso ir a la iglesia.
La presencia de Coronavirus no suspende ninguna parte de la Declaración de Derechos.
Esta pandemia del gobierno me recuerda las palabras del izquierdista Saul Alinsky, un revolucionario liberal, quiendijo en lo que respecta al control de los ciudadanos, “[usted] debe sacudir los patrones prevalecientes de sus vidas: agitar, crear desencanto y descontento con los valores actuales, para producir, si no una pasión por el cambio, al menos un clima pasivo, afirmativo y no agresivo
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